SIMBOLOGÍA TEMPLARIA

La simbología Templaria es amplia, no solo por sus ornamentos, si no porque trajeron de otros países y culturas numerosos símbolos. Algunos de ellos como veremos más adelante los utilizaron hábilmente los inquisidores como símbolos paganos para acusarles de herejía.

LA CRUZ DE LAS OCHO BEATITUDES

1ª Beatitud: Poseer el contento espiritual. 2ª Beatitud: Vivir sin malicia. 3ª Beatitud: Llorar los pecados. 4ª Beatitud: Humillarse al ser ultrajados. 5ª Beatitud: Amar la justicia. 6ª Beatitud: Ser misericordiosos. 7ª Beatitud: Ser sinceros y limpios de corazón. 8ª Beatitud: Sufrir con paciencia las persecuciones.

LA CRUZ PATÉ

Es una Cruz que abre sus extremos a los 4 puntos cardinales. La Cruz Paté con sus cuatro brazos iguales evoca a los cuatro evangelistas, a las cuatro estaciones y a los cuatro elementos: Aire, Tierra, Fuego y agua.  Se cree que esta fue la primera Cruz (Ancorada o Paté) que recibieron el 24 de Abril del año 1147 de manos del Papa Eugenio III.

EL BAUSANTE TEMPLARIO

Se conocen varias representaciones del estandarte de la Orden del Temple, las más conocidas son media negra y media blanca, o en tablero de sesenta y cuatro casillas como el del Ajedrez.

Durante la batalla, el templario ocupado en llevar la bandera debía hacer lo posible para protegerla y mantenerla por encima de la contienda. Estaba totalmente prohibido usar la bandera a modo de arma durante la lucha. En cualquier caso, el abanderado solía ser un caballero que ya hubiera demostrado su coraje y valentía en la guerra. Una docena de hermanos le escoltaban y protegían durante la refriega.

EL BAPHOMET

Nadie ni siquiera a día de hoy sabe exactamente que era el “baphomet”. Un busto o cabeza cortada (del mismísimo San Juan Bautista decían algunos) era lo que utilizó hábilmente la inquisición como piedra angular de sus acusaciones de herejía. Nunca se encontró semejante “ornamento”, pero se introdujo en el folclore templario con una facilidad pasmosa.

En los procesos judiciales (manipulados) se les acusaba de tener el “baphomet” en sus rituales de ingreso a la orden, mientras se escupía y orinaba sobre la cruz de Jesucristo. Y que aquel artefacto era al que adoraban en lugar de al hijo de Dios. Muchos de ellos y después de varias sesiones de tortura, reconocieron tales actos y tener constancia de la existencia de aquella cabeza o busto, lo que facilitó a los inquisidores ajusticiar a varios templarios.

LOS SELLOS TEMPLARIOS

“El sello: o los sellos, porque además del que representaba la autoridad de la Orden, existía también el sello del Maestre, más personal”. -Alain Demurger-

Este sello, similar al que adorna los extremos de la página donde te encuentras tuvo varias y diversas interpretaciones.

Los templarios, dado que eran monjes, eran respetuosos con el voto de pobreza. Este sello no hacía más que representar, que no tenían porque cabalgar cada uno en un caballo, cosa que podían hacer ya que la mayoría eran caballeros, si no que dejaban de lado sus posesiones y compartían todo, incluso la montura. También puede representar la unión entre ellos y la entrega de la que hacían gala en la batalla. Algunos historiadores opinan que un sello “conmemorativo” a los fundadores de la orden, Hugo de Payns, y Godofredo de Saint-Omer.

La iglesia utilizó este sello durante el proceso contra ellos para acusarles de homosexualidad y herejía.